
Vendedores dicen que el nuevo ‘pico y cédula’ les permitió un mayor flujo de visitantes. 2.575 establecimientos funcionan con normalidad.
Para los comerciantes del Centro de Barranquilla, el mal tiempo empieza a quedar atrás. La esperanza se ha convertido en su principal premisa durante las últimas dos semanas, luego de que se levantara la restricción para la atención presencial de público.
Registros en las puertas de acceso a los locales, toma de temperatura y desinfección de manos y calzado son algunos de los “nuevos rituales” que deben cumplir los clientes, quienes poco a poco vuelven a realizar sus compras en este sector de la ciudad.
Aunque durante las primeras semanas se presentó una baja afluencia de clientes en los locales, la nueva fase del ‘pico y cédula’ (que habilitó números pares e impares para las salidas esenciales) ha posibilitado un incremento importante en las ventas.
“En las últimas semanas se ha visto una reactivación esperanzadora. La habilitación de más números de cédulas ha ayudado a tener un flujo mayor de ventas”, indicó Alejandro Zuluaga, gerente del Centro Comercial Colombia.
Zuluaga también sostuvo que siguen atravesando por una “dura situación” puesto que han debido incurrir en gastos adicionales para el funcionamiento de los protocolos.
Yasulis Solano, administradora de un local de ropa, sostuvo que las nuevas medidas sanitarias han tenido cierto impacto en las dinámicas de venta: “Muchas personas están dudosas de comprar por el tema de que no se pueden hacer cambios y/o medirse las prendas en el local. Hay momentos que hay movimiento de clientes, pero en otros momentos baja”.
A su turno, Angie Esparragoza, trabajadora de una joyería, indicó que son conscientes de que la temporada final del año no tendrá el mismo movimiento de años anteriores.
“A pesar de eso, esperamos que se pueda recuperar un poco la dinámica, después de estar casi tres meses cerrados”, dijo.
Por su parte, los ciudadanos han resaltado el “estricto cumplimiento” de los protocolos de bioseguridad y la exigencia del cumplimiento del ‘pico y cédula’, aunque se sorprenden por el alto número de establecimientos que debieron cerrar a causa de la pandemia.
“Las ventas virtuales son más costosas y nunca van a reemplazar las compras presenciales, porque uno pude constatar enseguida la calidad del producto que compra. He venido tres veces ya a hacer compras en el Centro y en todos los locales que he entrado están cumpliendo todos los protocolos”, aseguró Ibeth Caro, una espontánea compradora que transitaba por el Paseo Bolívar.
Balance del distrito
Ricardo Plata, secretario de Desarrollo Económico de Barranquilla, destacó que el proceso de reactivación económica del comercio no esencial en las localidades ha sido “gradual, responsable y seguro”.
El funcionario explicó que un total de 2.575 establecimientos y centros comerciales se encuentran funcionando en la capital del Atlántico, de los cuales 1.614 están ubicados en la localidad Norte Centro Histórico.
Plata indicó que 407 establecimientos más están en la localidad Suroccidente, mientras que otros 220 en la localidad Riomar. En las localidades Suroriente y Metropolitana se cuentan con 206 y 128 establecimientos, respectivamente.
El funcionario expuso que, en este momento, todas las empresas –de los sectores que el Gobierno nacional ha aprobado– pueden operar con normalidad tras la inscripción de sus protocolos de bioseguridad y el registro en la plataforma de la Alcaldía de Barranquilla.
Fuente: “Esperanzador” balance ofrece comercio, luego de reactivación. (2020, August 21). El Heraldo. https://www.elheraldo.co/barranquilla/esperanzador-balance-ofrece-comercio-luego-de-reactivacion-752209